jueves, marzo 29, 2007

Dos meses después




Esta semana un trozo de mí yace críptico en las letras que se borran con la humedad de su muerte.


La herida magra

no cicatriza
y atemporal habita
candelarizada
por un espíritu mágico
que poetiza
mis días

después
de su proceloso silencio.




6 comentarios:

Anónimo dijo...

wolas niña
por q tanta pena
q paso
te cuento q me voy la prox semana a talca ver a ni niño indo lala
besos te alo muxo
lichis

Anónimo dijo...

Ana María, sabía que esto no sería fácil. Qué bien que le escribas. Tú misma lo has dicho: "escribir es sanador".
Abrazo

Anónimo dijo...

Te veo tan fuerte, pero eres tan frágil. Ya tendremos tiempo de hablar...
Un abrazo y un beso.

Anónimo dijo...

Niña, no estés triste.
Todo pasará.

Anónimo dijo...

Geniaaaaaa.

BELMAR dijo...



Muy intersante tu trabajo fusionado con la fotografía... un abrazo!

«La vida es una bestia estúpida...» Stella Díaz Varín